El hacer croquetas era una de mis asignaturas pendientes. Todo el mundo habla de que si las croquetas de mi madre, que si las de Ana, que si las de mi tía del pueblo con pollo de corral... Y a mi que se me resistían, hasta que en Pequerecetas publicaron esta receta, que me pareció que estaba muy bien explicada y me salieron estas croquetas de foto!! Es una buena receta para aprovechar ese resto de pollo que nos ha dejado la recién pasada Navidad. No dejéis de hacerlas!!
INGREDIENTES
- 1 taza de café de aceite.
- 5 cucharadas soperas bien colmadas de harina.
- El cuarto de un pollo cocinado. (cocido, asado o frito).
- 1 cebolla.
- 700 ml. de leche, mejor entera, aunque también las puedes preparar con leche desnatada.
- 1 cucharadita de café de sal.
- 2 huevos.
- 1 taza grande de pan rallado.
PREPARACIÓN
Picar la cebolla en trozos muy pequeños. Desmenuzar el pollo.
Poner al fuego una sartén bien grande, poner el aceite y cuando esté ligeramente caliente, añadir la cebolla y media cucharadita de sal, y poner el fuego en el mínimo. Cuando la cebolla esté dorada, añadir el pollo, subir la temperatura del fuego como a fuego medio, ir dando vueltas a la cebolla y el pollo para que se mezclen bien, y dejar friendo como unos 10 min.
A continuación poner las 5 cucharadas grandes de harina y mezclarlo todo bien. Cuando esté todo bien mezclado añadir la mitad de la leche y con una cuchara, mejor de palo, mover con energía haciendo círculos en la sartén.
Cuando esté bien compacto añadir el resto de la leche repitiendo la misma operación, mover con energía la cuchara haciendo círculos. Tener en cuenta que de ésto depende que la masa salga fina. Hay que estar como unos 8 min. dando vueltas a la masa.
Cuando veáis que la masa se separa bien del fondo de la sartén según la vas moviendo, estará lista. A continuación ponerla en una fuente grande con unos 3 cm. de fondo. Veréis que la masa se va acoplando perfectamente a la fuente.
Dejarla reposar como mínimo 3 horas, si la tenéis de un día para otro mejor.
Para liar las croquetas preparar un plato bien grande con el pan rallado, y otro con los 2 huevos bien batidos. Con una cuchara de sopa ir separando pequeñas porciones. Ir colocando estas porciones en el plato con el huevo rebozándolas bien por todas partes.
A continuación pasarlas por el plato del pan rallado dándoles la forma. Cuando tengáis hecha esta operación colocarlas en una fuente.
Preparar una sartén no muy grande con abundante aceite, como una taza grande, lo suficiente para que cubra por la mitad la croqueta. El aceite, en este caso, tiene que estar bastante caliente.
Ir dando la vuelta a las croquetas según las veáis que se ponen doradas, no tardan casi nada en freírse, así que tenerlo en cuenta para hacerlo más o menos rápido, si no se os quemarán.
Picar la cebolla en trozos muy pequeños. Desmenuzar el pollo.
Poner al fuego una sartén bien grande, poner el aceite y cuando esté ligeramente caliente, añadir la cebolla y media cucharadita de sal, y poner el fuego en el mínimo. Cuando la cebolla esté dorada, añadir el pollo, subir la temperatura del fuego como a fuego medio, ir dando vueltas a la cebolla y el pollo para que se mezclen bien, y dejar friendo como unos 10 min.
A continuación poner las 5 cucharadas grandes de harina y mezclarlo todo bien. Cuando esté todo bien mezclado añadir la mitad de la leche y con una cuchara, mejor de palo, mover con energía haciendo círculos en la sartén.
Cuando esté bien compacto añadir el resto de la leche repitiendo la misma operación, mover con energía la cuchara haciendo círculos. Tener en cuenta que de ésto depende que la masa salga fina. Hay que estar como unos 8 min. dando vueltas a la masa.
Cuando veáis que la masa se separa bien del fondo de la sartén según la vas moviendo, estará lista. A continuación ponerla en una fuente grande con unos 3 cm. de fondo. Veréis que la masa se va acoplando perfectamente a la fuente.
Dejarla reposar como mínimo 3 horas, si la tenéis de un día para otro mejor.
Para liar las croquetas preparar un plato bien grande con el pan rallado, y otro con los 2 huevos bien batidos. Con una cuchara de sopa ir separando pequeñas porciones. Ir colocando estas porciones en el plato con el huevo rebozándolas bien por todas partes.
A continuación pasarlas por el plato del pan rallado dándoles la forma. Cuando tengáis hecha esta operación colocarlas en una fuente.
Preparar una sartén no muy grande con abundante aceite, como una taza grande, lo suficiente para que cubra por la mitad la croqueta. El aceite, en este caso, tiene que estar bastante caliente.
Ir dando la vuelta a las croquetas según las veáis que se ponen doradas, no tardan casi nada en freírse, así que tenerlo en cuenta para hacerlo más o menos rápido, si no se os quemarán.
La verdad es que las croquetas también son mi asignatura pendientes, nunca las he hecho! Yo creo que es porque mi madre las hace riquísimas, entonces ni me molesto en hacerlas yo, jeje. Estas que has hecho tienen muy buena pinta, lo mismo me animo!! Besos
ResponderEliminarAnimate!! Aunque realmente son un reto teniendo a tu madre que las hace taaaan ricas!!
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