Corpus Christi es la fiesta del
Cuerpo y la Sangre de Cristo, de la presencia
de Jesucristo en la Eucaristía.
Este día recordamos la institución de la Eucaristía que se llevó a cabo el Jueves Santo durante la Última Cena, al convertir Jesús el pan y el vino en su Cuerpo y en su Sangre.
Es una fiesta muy importante porque la Eucaristía es el regalo más grande que Dios nos ha hecho, movido por su querer quedarse con nosotros después de la Ascensión.
Este día recordamos la institución de la Eucaristía que se llevó a cabo el Jueves Santo durante la Última Cena, al convertir Jesús el pan y el vino en su Cuerpo y en su Sangre.
Es una fiesta muy importante porque la Eucaristía es el regalo más grande que Dios nos ha hecho, movido por su querer quedarse con nosotros después de la Ascensión.
Custodia de la Catedral de Sevilla |
INGREDIENTES
Para el bizcocho:
- 200 gr. de azúcar
- 3 huevos
- 80 ml. de aceite girasol
- 200 ml. de nata
- La ralladura de un limón
- 230 gr. de harina
- 1 sobre de levadura Royal
Para decorar:
- El zumo de un limón
- Azúcar
PREPARACIÓN
Precalentar el horno 180º C. Batir el azúcar junto con los huevos
con la ayuda de unas varillas hasta que doblen el volumen. Incorporar el aceite, la nata y la
ralladura de limón. Batir un poco para que se integren los
ingredientes.
Tamizar la harina junto con la levadura e incorporar a la masa, lo justo para que no haya grumos. Engrasar el molde, verter la
mezcla, alisar la superficie y hornear unos 40 minutos, hasta que al
pinchar con una aguja en el centro ésta salga limpia.
Truco: Si vemos que todavía el
bizcocho no está hecho del todo pero ya está tostadito, cubrir la superficie
con un poco de papel de aluminio.
Sacar el bizcocho del horno, esperar
a que temple, desmoldar y dejar enfriar por completo. Partir el bizcocho en trocitos. (Si el
bizcocho ha subido bien, nos saldrán trocitos alargados. Estos los partimos en dos para que el trocito sea tamaño bocado).
Exprimir el zumo de un limón y pasar rápidamente
cada trocito de bizcocho por el zumo, lo justo para que empape un poco. A continuación rebozar en azúcar la
parte húmeda del bizcocho. Os recomiendo, tras la experiencia, rebozar la parte inferior, porque el bizcocho queda muy esponjoso y si lo hacemos por la parte de arriba tiende a romperse. Y ahora a servir.
Hola Mónica, el domingo que celebramos el Corpus, hice como tu estos bizcochitos de limón... y ¡cómo estaban!! ¡Riquísimos! y tan fáciles de hacer.
ResponderEliminaren casa todos encantados.
Además les llevé a las chicas con las que hicimos la alfombra de flores y les parecieron estupendos.
Sigue así, cocinando y enseñándonos tus recetas.
Un beso
Ana